La escritura es la tinta del alma
Afrontar sucesos que creemos son más grandes que nosotros mismos, reescribir la historia, descubrir que tenemos la posibilidad de ser artífices de nuestra propia vida. De eso se trata la escritura terapéutica, terapia que en los últimos tiempos se ha comenzado a utilizar para abordar distintas problemáticas emocionales y para descubrir que a través de la escritura se puede definir la vida y recuperar la armonía que se pierde en momentos del caminar.
Un estudio demuestra que expresar por escrito los sentimientos acelera el proceso de cicatrización. Según un artículo publicado en el periódico El País “Coger lápiz y papel, o un teclado, y convertir los sentimientos en palabras es para muchos un alivio emocional, sobre todo cuando se han vivido episodios traumáticos. La escritura sirve en ciertos momentos de la vida como terapia. Esto no es nuevo, numerosos estudios realizados en las tres últimas décadas lo demuestran. Psicólogos y psiquiatras incorporan la redacción como método de alivio emocional de sus pacientes. Pero una investigación reciente de la Universidad de Auckland (Nueva Zelanda) ha constatado que escribir ayuda, además, a acelerar la cicatrización de las heridas.
Elizabeth Broadbent, psicóloga del departamento de medicina que ha dirigido el estudio ‘Escritura expresiva y curación de heridas en personas mayores’, publicado en el número de julio de Psychosomatic Medicine, asevera que la escritura funciona como cicatrizante cuando versa sobre eventos tristes “o los sentimientos más profundos de la persona”.
Son muchos los beneficios de la escritura. Permite organizar y estructurar el pensamiento, estimular la creatividad, ayuda a encauzar las frustraciones, miedos, fantasmas, ansiedad. Así mismo mejora las relaciones con los demás, ayuda a reducir el stress y nos ayuda a comunicar mejor las ideas.
A mí en lo personal me ha salvado de la melancolía y el pesimismo en muchos momentos y me ha permitido ponderar situaciones en las que me siento atrapada en mis relaciones conmigo misma, con otros, y en medio de este mundo lleno de complejidades.
El profesor James W. Pennebaker, de la Universidad de Texas, ha investigado durante dos décadas cómo la escritura expresiva puede ayudar a curar heridas emocionales. Recomienda buscar un momento donde no seamos molestados y podamos escribir de forma continua al menos durante veinte minutos. No preocuparnos tanto por la ortografía o la gramática como por la sinceridad de lo que se escribe. Escribir sobre acontecimientos o eventos que realmente siente que desea afrontar.
La escritura también puede ser una herramienta útil para activar la capacidad creadora, lo cual permite tomar conciencia de la propia valía como seres humanos y del poder interno que llevamos dentro. Son muchas las personas que llevan blogs y que a través de las redes sociales expresan de modo creativo su visión de mundo, cuentan historias que solo pueden contar desde su propia vivencia, lo que les ayuda a renovar el interior a la vez que contagian a otros de lo positivo de la vida.
Para compartir las técnicas de la escritura terapéutica con todos aquellos que deseen descubrir sus beneficios hemos diseñado junto al periodista y bloguero Mario-Alegre Barrios el taller Escritura Terapéutica para escribir la nueva historia. El mismo se llevará a cabo el 3 de diciembre de 2016. Para información y matrícula www.crecimientoaplenitud.org
o llama al 787-375-7854.